Prolina

La prolina es uno de los aminoácidos no esenciales, que forman parte de las proteínas y se forma directamente a partir del ácido glutámico. Su estructura química se caracteriza por su cadena lateral cíclica.

La Prolina está involucrada en la producción del colágeno y por esta razón es fundamental para la reparación, curación y mantenimiento de diferentes tejidos como el muscular, conectivo y huesos. Además forma parte de los ligamentos y tendones.

La Prolina es útil en el fortalecimiento de las articulaciones y tendones, ayudando a la prevención de las artritis, al conservar las articulaciones. La absorción de la Prolina en el intestino delgado trascurre por medio de transporte activo, lo cual necesita de acoplamiento de energía metabólica celular y del sistema de transporte especifico ubicado en la membrana de los eritrocitos. El catabolismo de la Prolina da lugar a la producción de nitrógeno, el cual es eliminado por la orina.

Funciones que desempeña la Prolina en el organismo

– Es fundamental para el restablecimiento de los tejidos conectivos dañados.
– Es parte integrante de ligamentos y tendones.
– Ayuda en el tratamiento de las enfermedades articulares.
– Mejora la textura de la piel, ayuda la producción de colágeno.
– Ayuda en los tratamientos de impotencia y frigidez.
– Actúa como un protector cardiovascular, inhibe la descomposición de colágeno arterial, para impedir posibles lesiones.
– Reduce los efectos del envejecimiento.
– Ayuda en la cicatrización de heridas, ulceras y quemaduras.
– También confiere flexibilidad a la molécula de inmunoglobina.
– Se utiliza para dolencias del aparato digestivo producto de parásitos o infecciones intestinales.

La falta de Prolina en el organismo puede provocar

– En caso de cáncer, mayor predisposición de la metástasis.
– Retraso en la cicatrización de las heridas y quemaduras.
– Mayor predisposición a padecer alteraciones cardiovasculares.
– Debilidad en ligamentos y tendones.
– Retraso en la recuperación de tejidos conectivos dañados.

Alimentos ricos en Prolina

ORIGEN ANIMAL: carnes, pescado, lácteos, huevos.

ORIGEN VEGETAL: vegetales ricos en vitamina C, legumbres, arroz integral, semillas, cereales integrales, brócoli.

FRUTAS: bayas rojas, kiwi, pimiento rojo y verde, tomates, espinacas, zumos hechos de naranja, toronja, guayaba, limón, fresas, coles de brúcelas y melón

Dosis diaria recomendada de Prolina para el organismo

Su dosis como complemento dietético suele ser cercana a los 500 mg.

La prolina presenta actividades sinérgicas con:

– Vitamina B3.
– Vitamina C.
– Lisina.
– Treonina.
– Serina.
– Ornitina.
– Glutamina.

Enfermedades en las cuales el uso de Prolina es recomendado

– Aparato digestivo: parásitos intestinales, infecciones intestinales.
– Dermatitis: callosidades, heridas, quemaduras, ulceras.
– Traumatología/Reumatología: artritis, esguinces, lesiones en ligamentos, lumbago, laxaciones, tendinitis, torticolis.

Precauciones a tener en cuenta con el uso de prolina

El consumo de prolina se considera, en general seguro no obstante, las personas que sufren de afecciones hepáticas o renales no deben ingerir grandes cantidades de aminoácidos sin la supervisión de un profesional de la medicina, deben tener en cuenta que la prolina puede incrementar la cantidad de aminoácidos que ingieren a lo largo del día.

No se recomienda el consumo de grandes cantidades de prolina a personas con desorden del sistema nervioso y celiacos. Tampoco deben consumir cantidades extras de prolina las personas que sufren hiperprolinemia, enfermedad metabólica hereditaria que se acumula la prolina en exceso.

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